En un alarde de optimismo vamos a dar por hecho, que hemos conseguido traer a primera lìnea del debáte público, la novedosa idea de que existe un movimiento social en España, mas numeroso que la suma de los votantes de las dos principales formaciones politicas,que suelen alternarse en el poder.
El tèrmino de moda ya es " La revoluciòn de los excèpticos", " La segunda transiciòn" u otros similares .
Esto llevará aparejado el planteamiento de muchas cuestiones, a saber.
¿ Cual es el mecanismo exacto, el método concreto con el que se pretende transformar España?
Si atendemos a los movimientos en las redes sociales que se postulan como protagonistas de estos cambios nos encontraremos:
Aquellos que mediante una altísima abstención y protestas en las calles, pretenden que sean los propios polítcos actuales, los que en un arranque de moral ética y generosidad inicien los cambios.
También tenemos los que realizan un magnifico trabajo en temas de transparencia, los que presionan con la separación de poderes o los que ponen el acento en la ley electoral, además proliferan los partidos nuevos y minoritarios, partidos de jubilados, de autónomos, etc.
Parafraseando a Sorrentino diría aquello de " Todos tienen razón", pero la cuestión clave no es si lo que proponen es justo o no , o , si es beneficioso para la sociedad o no, las preguntas que la machacada a mentiras y promesas incumplidas sociedad se haría son ......
¿ Qué aportan de nuevo tus propuestas? ¿ Porqué esta vez va a ser diferente?
Y la verdad es que no estamos aportando nada nuevo, ninguno de nosotros ni de los grupos en los que ejercemos de reformistas, estamos poniendo en la mesa algo realmente diferente que cambie el modo de funcionamiento de nuestro sistema.
Todo se basa siempre en la confianza, la confianza que los ciudadanos tenemos que obligatoriamente tener en las promesas contenidas en los programas electorales de los políticos, no hay alternativa, se trata de comprar el producto o no comprar nada, no hay un producto para " desconfiados" y eso es la sociedad española ahora mismo una enorme y gigantesca bolsa de desconfiados
¿ Y cómo podemos romper esta dinámica y revolucionar el mercado electoral?
¿ Cómo podemos hacer valer nuestros intereses en un sistéma diseñado cuidadosamente para evitar que esto suceda?
Pues partiendo de dos limitaciones esenciales, a saber, tendremos que contar con lo que ya existe el momento actual y es operativo, y obviamente no podemos salirnos de la ley ni usar la violencia, la herramienta son las elecciones generales, se trata básicamente de usar las elecciones generales a modo de referendum. Es decir conseguir que esas formaciones que prometen cambiarlo todo a mejor y traernos democracia y justicia para todos se presenten a las próximas elecciones ofertando un producto que rompa el mercado politico y electoral.Este nuevo producto consiste básicamente en sustituir el viejo, gastado y desprestigiado programa electoral, documento sin ningún tipo de validez legal ni formal por un nuevo contrato electoral entre partes que contemple la característica esencial de que por su propia naturaleza se deba cumplir si o si lo pactado en él.
Los detalles de como podría materializarse este nuevo contrato electoral darían para otro post, en este solo volver a hacer incapíe en que por primera vez estariamos vendiendo reformas reales, concretas, frente a la colección de promesas y discursos manoseados de siempre, y que estas reformas que vendemos no dependen de nuestra honradez ni de nuestra intachable trayectoria( hasta el momento), sino que por el contrario dependen de un sistema que no nos permitirá engañar, mentir ni imcumplir lo acordado en el contrato, debido a la naturaleza de ese contrato.
Al igual que un banco no fía la devolución de los préstamos que concede a la buena voluntad y honradez de sus clientes, sino que se asegura legalmente, el ciudadano haría exactamente lo mismo, cubrirse legalmemte ante un uncumplimiento.